![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhC6aU5kjTfYgYpAcdrlKcTpyUXjNTrjzHpLhFeOCmcXP44IfXIrrJ5In6IGn_Q0Odjwgs8omn-D75vLEOoFtWG0_-05IpdRE6YuSEO4WcWg8_32yXHCXN2Id_prCAvtipnDtwiMJPbGTc/s320/thanks+for+the+ether.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjBwz8LE5EdrXVBVp_0snLfkjhNxT-j9pHRkphN1F1pNqKcJDk4xf9GTyy0cV6kBBlCbKUFhHHcXlpno_z8OkdoB3Ks3-MXqycO7W2Tokq2aau5E0LygFMkoIZKaMvmIm0sZSQTaDg0_40/s320/8894_lrg.jpg)
El Filo de las Cuerdas Viajando por el Tiempo.
El Pasado. El momento existió, aquel en el que las canciones de Muse eran gloriosas, tazajantes e imponentes. Fue una de esas bandas que podías presumir con tus amigos. Pero todo acabó. Sin embargo, Vitamin Records tuvo la grandiosa idea de imprimirle más dramatismo a la música de la banda haciendo un disco tributo; uno que si vale la pena: The String Quartet Tribute To Muse. Los violines, violas, chelos y contrabajos hacen que cada nota se mezcle con tu torrente sanguíneo y así puedas recordar el poder que algún día tuvo el trío inglés.
El Tiempo Indefinido. Suenan a una casa vieja, grande, abandonada pero llena de notas dibujadas en partituras invisibles. Chelos, batería, historias convertidas en canciones y muy peculiares portadas de discos son la esencia. Thanks For The Ether de Rasputina se lanzó en 1996 pero no suena a ese año, ni a este 2011. No cabe duda que la Música es la real y verdadera máquina del tiempo.